EL GOBIERNO HABRIA COLOCADO SISTEMAS DE INTERCEPCIÓN DE E-MAILS EN LOS PRINCIPALES PROVEEDORES DE INTERNET DE LA ARGENTINA
Con la sangre en el ojo por el escándalo de la difusión pública de e-mails comprometedores, el Gobierno quiere controlar las comunicaciones violando la privacidad interceptando las conexiones vía Internet.
El abrupto corte del servicio que sufrió ayer Fibertel, proveedor de servicio de banda ancha por cablemódem, se habría producido porque personal de la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC), juntamente con personal de la Side ( S.I.), conectaron a los servidores de esa empresa un sofisticado sistema informático que le permite al Gobierno supervisar los correos electrónicos y revisar los sitios por los cuales navegan los usuarios.
La medida es inconstitucional: el artículo 18 de la Constitución Nacional establece que la correspondencia epistolar es inviolable -sin perjuicio que una ley determinará en qué casos y con qué justificativos podrá procederse a su intercepción-, mientras que el artículo 13, inciso 8 de la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires dispone que "las escuchas telefónicas" sólo pueden ser ordenadas por el juez competente. Esto podría aplicarse a las comunicaciones por Internet. En ese sentido, cabe agregar que la ley 19.798 de Telecomunicaciones, luego de definir como "correspondencia de telecomunicaciones" a toda "comunicación que se efectúe por los medios de telecomunicaciones públicos o privados autorizados" (art. 2), indica que la correspondencia de telecomunicaciones es inviolable" y que "su interceptación sólo procederá a requerimiento de juez competente" (art. 1
; y que la inviolabilidad de la correspondencia de telecomunicaciones importa la prohibición de abrir, sustraer, interceptar, interferir, cambiar su texto, desviar su curso, publicar, usar, tratar de conocer o facilitar que otra persona que no sea su destinatario conozca la existencia o el contenido de cualquier comunicación confiada a los prestadores del servicio y la de dar ocasión de cometer tales actos" (art. 19).
El proyecto –qué generó una gran polémica- no es nuevo y fue denunciado por Seprin hace un año. Lo que ocurre es que ahora, más que almacenar, lo que se hace es interceptar o mantener bajo vigilancia a una o a cientos de personas que al Gobierno le interese, sin ningún tipo de control. De esta forma, no necesita saber la clave de un correo, directamente intercepta la conexión.
El sistema es similar al Data Voice Call Recording and Acquisition Units (DVCRAU)... Pero básicamente aplicado en la red troncal de los principales proveedores.
Se sabe que esa "caja negra" (por definirla de alguna manera) remitirá la copia de cada uno de los correos que lleguen o se emitan por intermedio del dominio " fibertel.com.ar" al personal de la CNC y de la Side para su análisis y clasificación. También se estarían supervisando los sitios por los cuales navegan los usuarios de Internet, almacenando en un listado el día y hora de acceso a dichas páginas.
Los proveedores "Speedy" (Telefónica de Argentina) y "Arnet" (Telecom) ya tendrían instalados en sus servidores, la "caja negra" instalada por la CNC y bajo el control del personal de la Side.
Por supuesto esta información es un escándalo nacional que seguramente intentará ser tapado, pero según nuestras fuentes el proyecto de intercepción o el decreto fue anulado, pero no la operatoria que siguió adelante.
En una comunicación con la empresa Fibertel, la oficina de prensa nos confirmó que "hubo un corte del servicio", pero no sabe por qué (" y que el dato de decir que "habrían puesto una caja negra" no le constaba...
Según un técnico consultado por Seprin, que fue muchos años gerente de sistemas de un importante proveedor de Internet, Fibertel tendría ya instalado un proxy (una máquina) , que "filtra" el spam, pero que también sirve para interceptar los e-mails.
Esta información fue chequeada por altas fuentes de inteligencia...
NOTA: Los e-mails, QUE NO ESTAN ENCRIPTADOS, pueden ser fácilmente interceptados, "capturando" el tráfico de información. Para esto hay varios programas que "se pueden adquirir" en Internet libremente, como los snifers, o programas similares que capturan el correo plano (sin encriptación) de cualquier persona, simplemente sabiendo la dirección IP del momento en que se conecta.