Con el boom de las extensiones, que generó furor en las peluquerías -en especial en las porteñas-, se reactivó la compra-venta de cabello real
El negocio de la compra-venta de cabello siempre se asoció con la confección de pelucas. Esto sucedió básicamente porque hasta el momento, ningún material sintético imitó con suficiente fidelidad, la caída, resistencia y textura propia del pelo natural.
En la actualidad, el cabello se utiliza para la fabricación de postizos, extensiones, colas y cortinas (que son una especie de entretejido) dado el “boom” ocasionado por la simple acción de la moda, hace ya 2 años.
Mueve buen dinero, ya que detrás de las extensiones hay todo un público femenino –y en menor medida masculino- que sostiene al mercado.
¿Cuánto se paga el kilo? Según indicó Adrián Arias, peluquero especialista ubicado en la avenida porteña Córdoba al 1500, “el pelo se paga por peso y sirve a partir de los 40 centímetros en adelante. Aunque el precio varía según la calidad, un kilo cuesta en promedio 500 pesos”.
Arias recordó que una cabeza tiene alrededor de 100-150 gramos. Por tanto, se podrá obtener entre 50 y 100 pesos, según color y calidad.