Ingieren hojas fermentadas de remolachas y nabos, lo que los deja “como un bebedor después de 15 cervezas".
Los bosques de la República Checa se han convertido en lugares inseguros a causa de los ciervos borrachos, de los que una asociación advierte a los excursionistas sobre todo en la zona de Bohemia, informa la agencia alemana de noticias DPA.
Los animales acaban borrachos por la ingesta de hojas fermentadas de remolachas y nabos, señaló Jiri Silha de la Asociación de Cazadores de Bohemia y Moravia al periódico Lidove noviny de hoy.
El azúcar de las plantas, que se transforma en etanol debido a la fermentación, deja a los animales sin coordinación, "como un bebedor después de 15 cervezas", señala Silha, quien pide que se informe de la presencia de estos ciervos si se los ve.
La Asociación coloca comida en lugares específicos para que los animales no coman las hojas fermentadas. "Algunos animales pueden morir por los daños al sistema nervioso", comentó Silha a la agencia DPA.