Aunque tendrá sólo cinco "modestas" estrellas, el proyecto en Shanghai está en medio de un lugar casi impenetrable y cuenta con una cascada que cruza toda su estructura
Un hotel cinco estrelllas será la nueva atracción mundial turística de Shanghai, China. Pero no es un complejo más, sino una de las obras arquitectónicas más impresionantes de las que el hombre tenga memoria por la complejidad en que se encuentra el lugar de acceso al terreno.
Se trata del "Songjiang Hotel", un proyecto inmerso en el desierto pero que cuenta con una particularidad asombrosa: una cascada de agua atraviesa su estructura por el exterior, ya que el edificio forma parte de las paredes de una "garganta" donde se acumula el agua.
El hotel se integra con la pared donde desemboca el río y contará con unas 400 habitaciones exclusivas para los turistas. Pero también tendrá lugar para conferencias para 1.000 personas, un centro de banquetes, restaurantes, cafés y centro de deportes.
La construcción forma parte del "atrio" de la cascada y ofrece una imagen impactante para cualquier amante de la naturaleza y la arquitectura moderna.
El distrito de Songjiang es un típico y nutrido centro turístico de los pobladores de Shanghai y cuenta con todo tipo de maravillas naturales. El particular terreno obliga a los constructores a ampliar su imaginación para poder aprovecharlo al máximo.
El proyecto de Atkin ganó en China este año la competencia por el mejor diseño arquitectónico de hoteles cinco estrellas.