Klistina y sus subditos viven en un país de fantasía... Donde las retenciones (mejor dicho, embargos) al campo son justos (acaso se cree Robin Hood???), donde el Indec no está manipulado y en el país casi no hay inflación (si! si! malos, malos que quieren desprestigiarla!!! pobre presidenta), donde la pobreza no existe y donde la corrupción es cosa del pasado...
No... evidentemente nos siguen tomando de pelotudos. Hacen millonarios negociados oscuros en nuestras narices y piden que les creamos...
Pero esto es así, siempre lo fue... siempre lo será... Pensamos que en las próximas elecciones el voto va a servir como castigo, pero no... porque el que viene es igual o peor... y, al final, siempre vemos las mismas caras y se terminan llenando los bolsillos a costa de la gente...
Con este tren bala nos venden humo... Y nos obligan a comprarlo...