Los intereses de Messi
Por Gustavo Veiga
Los padres de Lionel Messi y su ex representante, Rodolfo Héctor Schinocca, se querellaron mutuamente por estafa en 2006 y ahora la Corte Suprema de Justicia debe resolver la jurisdicción del caso, ya que dos jueces, uno de Rosario y otro de Buenos Aires, se disputan la competencia. El procurador general de la Nación, Luis González Warcalde, se pronunció para que el juicio se desarrolle en la Capital Federal, ya que en los dos expedientes “se imputan uno a otro haber percibido sumas de dinero provenientes de contratos de publicidad, sin ingresarlas en la sociedad con sede en Inglaterra en la que debían depositarse, de modo tal que también se endilgan mutuamente el incumplimiento de haber rendido cuenta de esos ingresos y retenerlos en derecho propio”. La sociedad británica es una offshore llamada Sport Enterprises Ltd., aunque los Messi habían abierto otra a instancias de Schinocca (Sports Consultants Ltd) con sede en el paraíso fiscal de Belice.
Todo comenzó en 2004, cuando el ex representante del jugador, un ex futbolista de Boca que apenas disputó siete partidos en 1984 en la Primera División (y nunca conoció la victoria), fue contratado por el matrimonio Messi para que manejara los intereses de la estrella del Barcelona. El también agente FIFA y contador público constituyó dos sociedades offshore para canalizar los millones de euros que por entonces empezaba a generar el millonario contrato de Lionel con el club español. Un contrato que pretendió comprar hace unas horas el jeque Sulaiman al Fahim, propietario del Manchester City, ofreciéndole al Barcelona 112 millones de euros, unos 38 millones menos que los fijados en la cláusula de rescisión.
Jorge, el padre de Messi, y su esposa Celia Cuccitini designaron tiempo después en lugar de Schinocca a un tío de Lionel, Claudio Bianccuchi, para que los representara. Sospechaban que aquél no era transparente en el manejo de sus intereses. González Warcalde sostiene en su dictamen que “cuando el futbolista cumplió la mayoría de edad, ratificó aquella cesión de derechos en la ciudad de Barcelona (hacia su tío). Contemporáneamente, los imputados desplazaron al querellante de los negocios comerciales, revocándole la autorización para utilizar la imagen y/o cualquier atributo de la identidad o personalidad de su hijo para todos los fines”.
Los Messi, quienes viven en Barcelona con su hijo y visitan esporádicamente las ciudades de Rosario o Arroyo Seco, le enviaron la primera carta documento a Schinocca en 2006. Hasta ese momento, Jorge Messi y el representante se mostraban felices en lugares públicos y habían compartido el Mundial Sub 20 de Holanda, donde Lionel salió campeón.
Cuando las partes rompieron la relación comercial, los padres del jugador le reclamaron a Schinocca que había cobrado por adelantado 1.600.000 euros provenientes de una marca deportiva, aunque la demanda que le iniciaron en los tribunales de Rosario ascendería después a 8.000.000 de euros. La carátula de esa causa es “Messi, Jorge, contra Schinocca, Rodolfo, por defraudación”. Este último se había anticipado con otro juicio alegando que las ganancias de Messi por derechos deportivos, federativos y de imagen eran depositadas en una cuenta a la que no tenía acceso, la de Belice. La causa quedó radicada en el Juzgado de Instrucción Nº44.
El problema de competencia que reactualizó el caso y ahora está en el despacho del juez Raúl Zaffaroni se difundió en el programa radial Bravo Continental. Está en juego una respetable porción de la fortuna ganada por el delantero, quien tiene contrato hasta el 2014 con el Barcelona
Fuente: Página|12 Sábado 7 de Marzo de 2009