Pablo Agüero entra en el laberinto de la historia argentina del siglo XX, guiado por el icono y emblema del cadáver de Eva Perón.



Como un ensayo minucioso, de buen lector de la historia argentina del siglo XX, Pablo Agüero, director de Eva no duerme, aporta su mirada en torno al destino del cadáver embalsamado de Eva Perón. La opera prima retoma hechos, documentos y literatura para exponer en tres capítulos, la potencia de una líder que atravesó las décadas como abanderada de los más débiles.

El director utiliza el registro audiovisual de la época, escenas multitudinarias de la Plaza de Mayo donde nació la esperanza de muchos y también se dio la represión brutal en junio de 1955. La voz de Eva suena en algunos momentos, aunque la película trabaja sobre ese cuerpo preparado para la eternidad, robado, profanado, desaparecido y recuperado, periplo que acompaña los procesos dolorosos del avance y sojuzgamiento de las clases desprotegidas.

En
El embalsamador, Imanol Arias encarna al doctor Ara, el español que dedicó desvelos y arte al cadáver. La constante de la película, que desde el comienzo crea atmósferas emocionales y visuales, va del thriller a la exposición aséptica. Eva no duerme es una película bella, de espacios cerrados, recurso inteligente del director que deja en manos de las imágenes documentales la multitud y su movimiento.Mientras tanto hace crecer la teatralidad.

En
El transportador, en la cabina del camión del ejército, y El dictador, la escena del secuestro y fusilamiento de Aramburu, la película pone la cámara sobre los personajes desgarrados de la historia. Es ineludible la cita a Rodolfo Walsh, ya que hay mucho de Esa mujer (aunque no dicho) en el modo de referir diálogos y posiciones políticas.

Las actuaciones hacen honor a la dificultad del registro, con Imanol Arias (Massera, el narrador); Dennis Lavant (el coronel Carlos Eugenio Moori Koenig); Daniel Fanego (Aramburu). La fotografía de Iván Gierasinchuk logra ambientes fantasmagóricos, con Buenos Aires bajo la lluvia, el traqueteo sobre el puente, un sótano con una sola lámpara que oscila, el claroscuro de los rostros con lágrimas contenidas, miedo, ira o resignación.

Una mano que se abre, el rigor mortis de una pierna, la máscara sobre el rostro donde el embalsamador busca dolor, cobra otro sentido en el trabajo de Ara que habla con ella (muy interesante procedimiento sobre el cuerpo de la actriz Sabrina Machi). Agüero no profana a su Eva. Deja que el cuerpo hable por sí solo. "La madre de las insurrecciones", dice Massera. Gael García Bernal y su voz son el contrapunto refinado, la anunciación del exterminio que Aramburu describió: "No van a quedar ni los cuerpos".

FICHA
Eva no duerme

  • Drama
  • MUY BUENA
  • Argentina, 2015. Guion y dirección: Pablo Agüero. Música: Valentin Portron. Fotografía: Iván Gierasinchuk. Con Gael García Bernal, Denis Lavant, Imanol Arias, Daniel Fanego, Sabrina Machi. 1:25'. AM/13. Complejidad media, violencia media, sexo nulo