La esposa de Ozzy Osbourne, Sharon Osbourne, se encargó personalmente de vengar el buen nombre de su pareja al tomar revancha con el líder de Iron Maiden, Bruce Dickinson, porque éste había hablado mal de su marido durante un concierto.
Entonces, ella decidió cortarle el suministro eléctrico en momentos en que Maiden daba un recital. :roll: :roll:
"Dickinson tuvo lo que se merecía", escribió la mujer en una carta en la que agregó: “"¿Acaso Dickinson fue tan ingenuo como para pensar que yo iba a permitirle salirse con la suya y hablar... de mi familia noche tras noche?".
Como consecuencia del corte en el sonido, los espectadores lanzaron diferentes objetos al escenario, según cuenta la agencia AP.